all you have to do is fall in love, play the game
I'm on my way to believing.
Si existe alguna palabra que describa lo que sentí dentro de mí en ese momento, que alguien me diga cuál es porque mi vocabulario no me alcanza. Fue un sueño hecho realidad y de la forma más literal posible. Fue lo que necesitaba para creer, lo que necesitaba para sentirme segura y aclarar todas mis insoportables dudas. Dijiste las palabras adecuadas y fueron tan sinceras que me siento una tonta por no haberte creído. Soy totalmente F E L I Z.
One vision.
Tengo tantas ganas de escribir algo que valga la pena y tan poca inspiración que me da rabia. Siento que mi sed de mejoras y progresos en la escritura nunca se ve saciada. Quiero escribir algo que realmente me identifique, algo de lo que me sienta orgullosa. No es que espere despertarme un día y escribir un nuevo Harry Potter (aunque tampoco me disgustaría que sucediera, claro está) pero al menos me gustaría ser capaz de plasmar en palabras algo de todo esto que me pasa. Emociones tan intensas como las que estuve viviendo el último tiempo, valen la pena ser registradas. Es obvio que jamás voy a poder siquiera acercarme a lo que realmente siento, pero me bastaría con expresar, volcar todo lo que pasa de la forma más clara y precisa posible. Es como un deseo interno, una necesidad de mi alma. Necesito dejar prueba escrita de todo esto. Es mi forma de entenderme un poco más, de comprender cada sensación, cada pensamiento, cada deseo, cada sentimiento. Y también, es la manera que encuentro de aclarar todas esas dudas o mejor dicho, inseguridades que dan vueltas por mi cabecita loca y que me nublan tanto. Escribir es mi catarsis, sin duda alguna. No niego que cantar despeja mi mente y hace que cada parte de mi cuerpo grite (en sentido figurado) lo que pasa debajo de mi piel pero las letras... las letras son algo mágico. Quizás el día que aprenda a componer música, pueda combinar mis dos más grandes pasiones y lograr que esa adoración por el canto y mi amor por la escritura se fusionen y terminar surgiendo algo valioso. Creo que ese es uno de mis objetivos en la vida: lograr plasmar mis sentimientos de las dos formas artísticas que más me atraen. Si hay algo que admiro de los músicos y de los escritores es eso. Que sean capaces de canalizar sus emociones, sus vivencias y sus ideas en un libro o en una canción y lograr que otras personas se identifiquen con su trabajo. Yo me sentiría completa si al menos una persona me dijera "me sentí muy identificado/a con tu trabajo". Es la mejor paga que podés recibir: saber que ayudaste a alguien. Porque a mí me alivia encontrar una canción, una frase o un personaje que me identifique. Me hace sentir que no estoy sola, que alguien pasó por lo mismo y pudo enfrentarlo, pudo superarlo. ¿Esa es la magia del arte, no? Sentirte conectado con alguien que quizás nunca vas a conocer, sentirte comprendido a nivel emocional por un extraño que parece, al mismo tiempo, un amigo de toda tu vida. ¿Quién no podría sentirse reconfortado con algo así? Esa es la prueba de que, al fin y al cabo, no somos tan diferentes. ¿Qué pueden significar los idiomas, las culturas, las ideologías, las religiones, las creencias cuando podemos unirnos de tal forma? No somos tan distintos.
I miss you, you know.
Otra vez esas emociones opuestas. ¿Hasta dónde va a llegar mi locura? Una parte de mí se siente enojada con vos, por tu falta de interés y, al mismo tiempo, otra parte busca razones para sostener la idea de que mi enojo fue estúpido. También estoy enojada conmigo misma, por haber roto mi promesa. Estoy harta de sentirme defraudada, por mi misma y por otras personas. Pero sobre todo por mí misma. Me prometí millones de veces lo mismo y otra vez caí en la misma situación. Odio sentir ese dúo de amor-odio. No me gusta. No me gusta para nada. No quiero enojarme con vos pero no puedo evitarlo. Te necesito, la puta madre. Es difícil no extrañarte y es todavía más difícil no dejar que eso me afecte. Yo sé que tiene que ver con eso. Lo sé por lo rápido que cambia todo dentro de mí, por lo rápido que se calma ese torbellino de sentimientos. Ahora estoy tranquila y en paz, pero sé que si pasa algo, mi humor se va a dar vuelta completamente. ¿Será que estoy loca en serio? ¿O serán las hormonas? ¿O será simplemente que te extraño demasiado y que busco formas de extrañarte un poquito menos?
Don't let me face my life alone.
¿Cómo puede ser que otra vez sienta estas tremendas ganas de llorar y de mandar todo lo referido a vos al carajo? Me da miedo que puedas cambiar mi estado de ánimo de esta forma. Me da miedo y me hace odiarte. ¿Cómo puede ser que te odie? No quiero sentirme así, la puta madre. No me gusta sentirme así. Sentirme tan débil, tan vulnerable me pone a la defensiva, me hace perder la cabeza y hasta perderme a mí misma. ¿Será verdad que valés la pena? ¿O será que me estoy engañando a mí misma? Lo peor de todo es que ni siquiera te das cuenta y estoy segura que te importa muy poco (si es que te importa). No me gusta sentirme tan fuera de mí. Son demasiadas emociones contrapuestas y me desespera. No sé que pensar ni de mí, ni de vos, ni de nosotros. No entiendo absolutamente nada. Y sigo sin saber que pasa por tu cabeza, y sobre todo, lo que pasa en tu corazón. ¡No quiero volver a lo mismo! No sé que mierda pensar de todo esto. Hay tantos sentimientos dentro de mí que ya no estoy segura de nada. ¿Alguien que apague mi cabeza, por favor? Quiero que vengas y me escuches. Quiero que me abraces y me digas que me querés, que todo está bien. Necesito que por una maldita vez que nazca de vos preguntarme "¿estás bien?" y que no tenga que forzarte a hacerlo. No quiero sentirme así, no quiero. ¡Date cuenta de algo por una vez!
She was just seventeen.
Bueno, tengo 17 años. No me siento muy diferente a lo que me sentía el 22 pero si entendí que hay ciertas cosas que cambiaron. Mis prioridades cambiaron y de forma increíble. No es que me sorprenda porque desde mayo para acá toda mi vida cambió y era de suponer que eso iba a influir en mi personalidad. Digo que cambiaron de forma increíble porque fue un cambio radical. Mis intereses, mi forma de ver las cosas, la manera en que las vivo y, sobre todo, la manera en que siento lo que me pasa. Creo que nunca me sentí tan conectada con esa parte sensible de mí misma. O tal vez simplemente se debe a que estuve negando por mucho tiempo mis emociones, ocultándolas como si fueran algo malo y ahora todo vuelve, sale a la superficie con el doble de fuerza. Cosas que antes me parecían estúpidas dejaron de serlo y cosas que parecían ínfimas se potenciaron hasta límites insospechados. Todavía me cuesta manejarlo. Me siento como si fuera un manojo de emociones contenidas que pujan por salir y en esa lucha se mezclan, se combinan y me vuelven loca. ¿Dónde empieza uno y dónde termina el otro? Se me hace muy difícil compatibilizar sentimientos tan distintos y contrapuestos que fluyen con el mismo nivel de intensidad. Es una pelea constante dentro de mí misma. Y ayer ese debate interno fue todavía peor. Creo que no perdí la cabeza porque estaba con dos de las personas que más me importan y eso mantuvo mis pies sobre la tierra. Fue un cumpleaños muy raro. Quizás hasta demasiado. Me faltaba algo, o mejor dicho, alguien. Pude bancármelo pero al final de cuentas, eso seguía ahí. Como dije, fue raro. Y encima tengo 17. Se me va la maldita, maldita vida. Llega 5º, Bariloche y tantas otras cosas. Va a ser un año raro, lo presiento.
I feel good, no one is gonna stop me now.
Es sencillamente increíble y sorprendente como todo resultó perfecto. Parece como si la semana pasada y todo mi mal humor y locura no hubieran sido más que una broma de mal gusto. Es casi absurdo como cambió todo. Pero no voy a explayarme en mi sorpresa porque prefiero dedicarme a disfrutar de mis vacaciones, con todo lo que eso conlleva. Estoy libre de materias (oh si), faltan 4 días para que cumpla 17 años y hoy viví unos de esos momentos para recordar. Por primera vez en este dichoso y demente mes de Noviembre me siento positiva. Y con esa repentina positividad viene la satisfacción. Porque esta es la versión de mí que quiero ser. Quiero creer, quiero poder ser yo sin preocuparme por lo que piensen los demás, quiero disfrutar de cada instante que paso con él y que mis boludeces no me atormenten, quiero reírme con mis amigos, quiero pasar momentos gratos con mi familia, quiero festejar mis 17 siendo feliz. Y hoy, cuando él me hizo esa pregunta, supe que lo material no me importa tanto como antes. Me da igual si mi regalan plata, un CD o un libro. Yo sólo quiero tenerlos a mis amigos, a él y a mi familia y poder ser feliz con eso. Porque hoy me siento así por esas personas que marcan la diferencia y que revierten hasta la más desesperante de las situaciones. Hice mi mayor esfuerzo para dejar de preocuparme y tuve mi recompensa. La salida de ayer y la tarde de hoy no la hubiera cambiado por nada. Ah, Dios. No les puedo explicar lo FELIZ que me siento. Es algo que me supera, en todas las dimensiones. Ojalá (y cruzo los dedos) esto dure mucho tiempo. Quiero seguir sintiéndome bien.
My dear readers, LAS VACACIONES ARE HERE! Por fin, tiempo para mí y libre de preocupaciones. Probablemente me lleve Taller y Química (TODA LA BRONCA) pero es un dato menor. Yo sé que las puedo sacar si me las llevo y aún tengo un mínimo de esperanza de que quizás, por algún milagro, no suceda. Lo importante es que tengo tres meses por delante para ser feliz, disfrutar y hacer todas las cosas que dejé de hacer ya sea por falta de ganas, tiempo o presupuesto. Mañana voy a ver Harry (♥), el viernes es el TOEIC y me tiene que ir excelente, y después se viene my birthday nº 17 :D Esta ese temita de las materias, pero una vez que me las saque de encima, HELLO SUMMER. Me siento llena de energía y con ganas de hacer muchas cosas durante mi verano. Muchos libros que quiero leer, muchas películas que quiero mirar, muchos lugares que quiero visitar, muchas personas (bueh, no tantas) que quiero ver. Quiero que sean unas lindas vacaciones. Las últimas fueron horribles y en gran parte fue por mi culpa. Quiero que ahora sea diferente. Si no son lindas, al menos voy a saber que intenté que así fueran y que di todo de mí. Es un objetivo interesante, ¿no lo creen?
Keep calm and carry on.
Hoy estuve a dos pasos de volverme loca. Me da miedo la mezcla de sentimientos que tengo en este momento. La parte más impulsiva de mí, junto con mi dramatismo y mi alma de adolescente incomprendida se potenciaron el día de hoy y les aseguro que no es una buena combinación. Hay una parte de mí que dice "no podés contar nunca con él y no le importás" y entonces es cuando el sentimiento de autodefensa surge y dice "mandalo al carajo y que se pudra". Pero entonces la razón y la cordura regresan y con ellas, mi paz interna. Es increíble la facilidad con que pierdo la cabeza y se altera mi equilibrio. No me gusta sentir que esa locura dolorosa se apodera de mí. Me hace perderme a mí misma y sentir que mi vida se va al traste. Esa actitud de "no me importa" o de "no quiero pensar" no es propia de mí, no es real. Él me importa y estoy dispuesta a darle una segunda oportunidad. Tengo que darle una segunda oportunidad. En cierta forma es como darme un segunda oportunidad a mí misma de cambiar, de poder disfrutar en vez de preocuparme. Es darme una segunda oportunidad a mí misma para creer en mí, por primera vez en mi maldita vida. Quiero disfrutar mi vida, la puta madre. Voy a cumplir 17 años... no puedo seguir con esta actitud. No me hace bien y no le hace bien a las personas a mi alrededor. Quiero realmente encontrar mi eje, otra vez. Sentirme cómoda con mí misma y con las personas que me importan. Ojalá pueda conservar la resolución y pueda lograr al menos alguna de las cosas que me propuse. I have faith
You are a wizard, Harry.
No puedo creer que esté por terminar Harry Potter. Simplemente no puede terminar. O sea, ¡es Harry! Esos libros que me acompañaron durante toda mi infancia y mi adolescencia. Esa magia que tanto me influyó y que me hizo, en parte, la persona que soy. Estoy segura que cuando termine la última película y caiga en la cuenta de que es el final, voy a llorar. Es una parte de mí. ¿Cuántas veces me emocioné, reí, lloré, me enojé o me sentí identificada al leer esas páginas? Harry es mi mayor inspiración a la hora de sentarme a escribir. Fueron los libros que hicieron que naciera en mí ese deseo de plasmar lo que siento, vivo y respiro en palabras. Recorrer los pasillos de Hogwarts junto con Harry, Ron y Hermione me ayudó a definirme como persona. Veo tantas cosas de ellos en mí... ¿Cuántas veces sentí que ellos decían lo que yo pensaba? ¿Cuántas veces me sentí Hermione? Ja... millones. ¿Y cuántas veces me sentí tan incomprendida como Harry? ¿Cuántas veces me reí de la inocencia de Ron y entendí que había algo de él en mí? Y Dumbledore... No me alcanzan las palabras para explicarles la grandeza que hay detrás de ese personaje. ¡Ejército de Dumbledore! Claro que sí. Luna y su increíble locura... ¡tantas veces deseé tener su valor! Hagrid... ¡que personaje tan tierno y sincero! Ah... Ginny. ¡Si habré soñado ser Ginny! Tan resuelta, tan segura de sí misma... Nadie mejor que ella para enamorar a Harry. Los gemelos, Tonks, Lupin, ¡Neville! Tantos personajes que en cierta forma se convirtieron en amigos y sobre todo, en una parte de mí. Porque Harry Potter dejó su huella en mi persona de 16 años (próxima a cumplir 17 :D) y NADIE lo puede negar. Mi vida no sería lo que es sin Harry Potter porque yo no sería quien soy si un día no me hubiera decidido a leer ese primer libro. Pasaron 10 años (meses más, meses menos) y con ellos pasaron muchas cosas. Amigos, escuelas, amores (en cierta forma) y tristezas. Cambié yo, cambiaron mis amigos, cambió mi vida. Pero si hay algo que NUNCA va a cambiar es esa parte de mí que se llama: HARRY POTTER.
OH SIIIIIIIIIII. LO HICE, PUDE HACERLO. PUDE HABLARLE SINCERAMENTE Y SOLUCIONAR ESE MALDITO PROBLEMA. Suena tonto pero es un gran logro para alguien con un nivel de timidez como el mío. Realmente espero que ahora todo se normalice y vuelva a sentirme tan segura, feliz y completa como antes. Voy a esforzarme para que esto funcione. Voy a esforzarme para que mi vida funcione.
Open up your heart.
Dios, tengo miedo. Mañana va a suceder ese momento que hace bastante tiempo vengo esperando. ¿Y saben qué? Tengo unos nervios y un miedo TERRIBLE. O sea, no sé si va a pasar algo malo pero es un tema complicado y que tiene que ver con mis sentimientos... y los suyos. No creo que la cosa se termine porque como me dijo ella "es sólo una piedra en el camino". Pero no puedo evitar ponerme nerviosa, ¿vieron? No es algo sencillo de explicar, y me da terror que no me entienda o peor... que me malinterprete y me salga todo al revés. Una cuando está nerviosa puede decir cualquier boludez y más cuando se trata de la persona de la que estás enamorada. Me preocupa que cuando llegue el momento, lo mire a los ojos y toda la resolución se me vaya al traste. Me conozco lo suficiente como para decir que eso puede pasar. Realmente quiero arreglar esto. Realmente quiero hacerlo. Quiero que esto siga y mejore. No voy a permitir que esto arruine lo mejor que me pasó en mucho tiempo. Es falta de diálogo nada más (o eso quiero creer). Él me dijo que podía confiar en él. Bueno, este es el momento para hacerlo. Tengo que tragarme toda esa timidez tan propia de mí y decirle lo que me pasa, lo que pienso y lo que necesito saber. Tengo que hacerlo o me voy a arrepentir toda mi vida. Ah, Dios. Tengo que sacar fuerzas y hacerlo. Yo puedo hacerlo. Yo puedo.
And I'm the only one and I walk alone...
¡Que linda forma de empezar Noviembre! (sarcástico). Es casi graciosa la forma en que todo me sale exactamente al revés de lo que yo esperaba. La gente no me deja de sorprender y sobre todo, no me dejo de sorprender a mí misma. Mi nivel de expectativas era tan alto al empezar el mes que me dan ganas de pegarme por haber sido tan ingenua. ¿No tuve pruebas más que suficientes que esto iba a volver a pasar? Es como un ciclo. Se acerca mi cumpleaños, yo lo espero ansiosa como una idiota y entonces, PUM! Mis ganas de festejarlo se esfuman al instante. El año pasado todo resultó bien al final pero la cosa es que la situación actual es diferente a la del 2009. Yo soy diferente a lo que era en ese momento. Y mis ganas de tirar todo a la mierda son mayores que las del año pasado. Es como que se van acumulando, acumulando y acumulando... Tengo mucho miedo de explotar y hacer algo de lo que pueda arrepentirme después. Siento olas de bronca, tristeza y dolor que se alzan dentro de mí y se chocan contra esa barrera que no deja que mis sentimientos se escapen. El tema es que no se cuánto más va a aguantar y que puede pasar si esa barrera colapsa. No quiero que colapse, de verdad que no. Que se yo. Ni yo me entiendo. Quiero irme por un tiempo, please.
Let the music play.
Mañana. OH SI, mañana. Mañana es 5 de noviembre de 2010. Mañana es mi último día de clases de 4º año, tengo prueba cuatrimestral de matemáticas (rayos) y (lo más importante) a la noche voy a ver QUEEN SINFÓNICO ♥ Estoy más que ansiosa y completamente preparada para disfrutar de mi música favorita. Espero que me vaya bien en la cuatri. Bueh, es una entrada rara :P Me fuí. Peace outtttttttttttttttt.
Don't let me down.
Odio, odio, odio con toda mi alma los arranques emocionales que me agarran de tanto en tanto. Hoy, al ver ese maldito mensaje, casi rompo todo. Se me llenaron los ojos de lágrimas y no pude evitar, por más que intenté, llorar como un bebé. Pasaron tantas cosas por mi mente que tuve miedo de hacer alguna locura. Es realmente sorprendente lo que una persona puede llegar a pensar cuando se siente sola, herida o triste. Y yo hoy sentí (y siento) esas tres cosas. Fue como un huracán de emociones que se apoderó de mí, a tal punto que me cegó por completo y me hizo capaz de hacer cualquiera cosa. Si no lo hubiera pensado dos veces... me dan escalofríos de sólo pensar lo que podría haber hecho. Necesito sentirme tranquila. Daría todo por poder encontrar una calma interna que me deje hacer mi vida, sin sufrir ni volverme loca. Odio sentirme así. ¿Cuántas veces dije esa frase durante el último tiempo?
Remember november.
Es muchos sentidos, Noviembre va a ser un mes decisivo. Primero que nada, están las cuatrimestrales. Es la última chance y se definen muchas de mis notas (que van a ser pésimas, ya les aviso). Admito que estoy bastante preocupada por ese tema, les tengo bastante miedito. También se viene mi birthday, que en parte lo veo como un punto de inflexión. Es como si hubiera tirado una moneda al aire que dice "23 de noviembre" y el curso de mi vida dependiera de cuál sea el lado en caiga. Eso sonó un tanto dramático, lo admito. Pero la cosa es que esa fecha puede tener muchos significados y eso me tiene con los nervios de punta. Desde hace ya varios días tengo esa sensación de que se vienen momentos de definiciones y la verdad, tengo miedo. Son sentimientos encontrados porque por un lado siento que necesito resolver las cosas y por el otro no quiero por terror a sufrir o a perder. Es totalmente irracional que me sienta así pero creo que ya quedó bastante claro que mi mente y mi corazón nunca se ponen de acuerdo. O tal vez, la que no se pone de acuerdo soy yo. ¿Interesante, no lo creen?
Retomando el asunto principal, noviembre siempre me pareció un mes cargado de cosas (lo sigue siendo) y en parte, es mi mes favorito. A principio de año, noviembre significaba cuatrimestrales, el estreno de HP 7, mi cumpleaños y vacaciones. Ahora (¡cómo cambian las cosas!), siendo hoy 2 de noviembre de 2010, este mes representa muchas emociones y, sobre todo, muchas expectativas. Noviembre puede ser tanto alegría como tener un sabor agridulce. Pruebas, Queen Sinfónico, cuatrimestrales, TOEIC, HP 7, vacaciones, exámen de Aricana, mi cumpleaños y... eso. Eso que me tiene dando vueltas, que hasta que no se aclare, no va a dejar a mi cabeza ni a mi corazón tranquilo. Sigo teniendo fe que todo va a terminar bien. Lo único que ruego, que pido, que suplico es que tenga una resolución clara y duradera. Estoy cansada de las dudas.
That's what you get for falling in love.
En este preciso instante, siento muchas cosas. Rabia, bronca, tristeza, dolor, ansiedad, miedo. Es como una mezcla de todos esos sentimientos que me obstruye la garganta. Tengo rabia por ser tan obsesiva, por estar tan pendiente. Tengo bronca por haber roto de mi promesa de quererme a mí misma, por verlo tan contento (es forro, lo sé), porque no haya ido. Siento dolor porque fue horrible salir y saber que él no estaba ahí. Eso me hizo sentir defraudada. Estoy triste porque a pesar de todo, lo quiero. Y la ansiedad... me va a volver loca. ¿Qué me queda? El miedo, claro. Tengo miedo de perderlo, de salir lastimada, de equivocarme, de perder lo que tenemos (sea lo que sea). Estoy tan confundida.... Quiero llorar, quiero gritar, quiero romper todo, quiero tenerlo conmigo, quiero besarlo, quiero que me diga que me quiere, quiero que se de cuenta de como me siento, quiero tirar todo a la mierda, quiero dormir por horas. ¡Cómo odio que me hagas sentir así!
A night to remember.
Ya está, ya pasó. Hoy es 1 de noviembre y tengo el orgullo, la emoción y la alegría de poder decir que estuve en el Supe en Escena por 4º año consecutivo. Estuve ahí, arriba de ese escenario, una vez más. Los nervios, las risas, los aplausos, los gritos, las sonrisas, la emoción, la felicidad. Todo estuvo presente, una vez más. Si hay algo que puedo decir de este año, es que me sentí más segura que nunca. Sentí que estaba ahí arriba porque quería, porque estaba haciendo lo que me gustaba, porque lo disfrutaba. Y estoy segura que se notó. Estoy segura que la gente se dio cuenta que estaba rodeada de mis amigos y que disfruté cada segundo que duró la obra. Disfruté cada instante, cada palabra, cada gesto. Y daría lo que fuera por hacerlo otra vez. El año que viene es mi último año, mi última oportunidad, mi última chance, mi último Supe en Escena. Yo sé que va a ser totalmente increíble... lo presiento. Es la última vez que voy a pisar ese escenario (creo) y voy a dejar todo de mí sobre las tablas. Te voy a extrañar, Supe en Escena, te voy a extrañar.